24 de octubre de 2008

cuando una nueva entrada ya no se esperaba

si ya lo sé llevo medio siglo sin escribir, pero alegraos, k lo mismo tardo otro medio en volver a escribir. el otro dia mientras paseaba por primera vez por el barrio salamanca pensé en lo idílico que sería tener cualquiera de aquellos castillejos en propiedad. casas rococós con su bado y todo para guardar mi adorado tiburoncito.

el caso es que fuimos a ver un concierto de música compuesta por autores soviéticos durante la urss (por cierto la tercera pieza parecía el ruido de psicosis extendido y con tomas falsas, el resto guai). y antes de llegar, mientras caminabamos hacia la fundación donde se interpretaba, vista mi total insolvencia se me ocurrío el título del libro definitivo k solucionaría todos mis problemas y me recompensaría haciendo todas mis ilusiones realidad. el título es bastante descriptivo y define bastante bien sus objetivos ya de inicio "henry, el mago que no tiene que ver nada con harry potter pero k espero k venda lo mismo k él" un poco largo, no? (pero se que a las chicas las cosas largas os gustan, ke bestia! y ahora mismo sois las principales lectoras). va sobre la vida de un chico muy imaginativo que convive con duendes inventados en un barrio periférico en donde paso toda su infancia. caracterizada por una terrible baricela k le lleno de secuelas más comunmente llamadas cicatrices, a parte, del desafortunado incidente en el que se le cayo un bote de aguarras en los ojos con la consecuencia lógica de que dsde entonces tuvo k llevar gafas. tras estos amargos tragos sus padres se mudaron a bilbao, a la orilla norte del nervión (un río muy húmedo en el que él y todos sus amigos querían bañarse) y fue allí donde aprendió a levantar piedras sin tocarlas (labor super útil). desde luego, toda una novela evocadora de posibilidades y grandes intrigas.

venga ahí va un regalito. no me lo valoraron, pero a mi me gusta, creo k es de lo primero realmente bueno que escribí: también creo que es el primero y el último k compartiré, no soy dado a muestras de ingenio, prefiero parecer más simple:

Cuando ya no te esperaba
Cuando el cielo ya menguaba
Cuando el abrasante dolor ya se templaba
Cuando ya no precisaba de revancha
Cuando ya el agua no llegaba
Y sólo eran dunas entronizadas en lo que antes era una vaguada
Yermas, áridas, ásperas, ya olvidadas
Historietas, comiquitas pintorescas, divertidas pero desgraciadamente apolilladas
Porque no hubo anticipo ni preaviso, porque te marchaste sin señales
A donde debía ir, donde tenía que acudir para de algo enterarme
Para sin saber como, recuperarte
Yo creí estar seguro de gustarte
Que en seguida volverías aquí, creí y creí
Pero los meses cayeron sobre mí
Moldeándome detalladamente esta cara de mandril
Por desconocer cual fue el matiz, por qué no supere tu tamiz
Y de repente, admiración, y ahora de donde sales tú
Con tu blusa translúcida y tu escueto canesú
Con esa inocente sonrisa que vale más que todo el oro del Perú
Con esa escarpada melena de amatistas
Con ese poder sobre mí como el que en Hamelin posee su flautista
Como el que las olas se reservan sobre las marismas
Y mi alma se resiente conmovida
Con tu evocado flamenquillo de puristas
Levantándome otra imposible bola sobre mi tierra batida
Yo que me sentí sentenciado como en la toma de la bastilla
Pensé "no hay más", seré el sordo que compuso y jamás escuchó su para Elisa
Aunque en sus adentros la repasara incesante con tremenda desazón
Con tan mala espina
Él solo en su salón
Tarareándola sin valor
Me dije me acostumbraré a estar sin sobresaltos
Sin chispas, sin porrazos, sin atravesar el afilado peñasco
Te confié mi patata
Y al no atenderla se resquebrajo despedazada
Pero al amparo de los venideros días, es cierto, se curtió en la batalla
Este corazón que parecía agonizar como una magdalena despellejada
Se endureció, más pequeño, al desaparecer de tantas migajas
Y aglutinó fuerzas prestadas
Pa que nadie lo notara, pa que nadie se fijara
Y de vuelta, el ambiente se enrarece, el cronometro se ralentiza
Y mi bum bum se hincha y corre más a prisa
Tú enfundada en tu falda de vuelos y jirones
Que se ensancha como un cancán que atrae a los malditos fisgones
Princesa presumida, muñeca anacarada
Envuelta en poco tupidas gasas
Por qué tu graciosa nariz se tuerce impertinente
Por qué me haces esto, por qué me muestro tan condescendiente
Por qué demonios estas tan linda como siempre
Por qué jamás vislumbro tus máculas lunares
Prendado de tus destellos, esos que tu vas tapando entre fulares
Embolátame al mirarme a los ojos, sosteniéndome con tus pulgares
Porque en esta vida de eructos, esputos y criminales presuntos
Sólo tú me dejas en evidencia, me haces inseguro
Sólo tú consigues relanzar a mí yo inmaduro
Del que asoma este yo tan absurdo
En donde yo integro no perduro
¿Por qué? ¿Por qué mana aún de ti esa fragancia de damascos y duraznos?
Habiendo regresado recién de tan lejos, de Urano
Por qué me afectas tanto, incluso más que un puñado
Por qué me vences, por qué no puedo serte desaborido y huraño
Por qué una sola mirada tuya me reconcilia con la esperanza
Por qué tus verdes turmalinas me alborozan al tiempo que me descarnan
Dime niña de dónde diablos floreces
De dónde brotas, de dónde surges
A quién le asombras ahora, a quién le amaneces
¿Hay alguien que no soy yo al que le nutres?
O que me vienes a manifestar, que me vienes a anunciar
Me vienes a auxiliar, a destrozar o a acuciar
Eres acaso un torpedo a mi base de flotamiento
O acaso el pegamento que haga eterno este sentimiento
O muy a mi pesar una demora, un triste aplazamiento
Porque desde que te vi sólo pienso en separarme contigo a un lugar recóndito
Donde nos demos rienda suelta, donde seamos tórridos
Donde te acomodes tú en mí, y me aloje yo en ti
Bordeando los límites de la locura, lo no cabal, lo senil
Si tuvieras compasión te alejarías de por vida de mí
Y si yo tuviera 2 dedos de frente no querría tanto abrazarme a ti
Sí, a ti, a mi estaca flameante
A mi adelantamiento temerario en cambio de rasante
Cómo impelerte a que te marches
¿Cómo? Cómo echar al clavelito noctilucente
Al deslumbrante tesorito desparramado que le incita a uno a ser imprudente
A mi pícara turquesa de valor incalculable
A mi adorable culpable, a mi golfilla achuchable
Y ahora que ya no ojeaba cada abrir de puertas esperando que entrases
Me vuelvo a preguntar "realmente ¿de donde sales?"
Y tan solo acuden a mi rescate respuestas de madre
Que si por qué el mundo es redondo
De si por qué se derrite el polo
De si por qué uno más uno son dos
De si por qué hay luna y luego sol
Porque las cosas son así, porque sí
Y es cierto, eres la que me aproxima al delirio, al frenesí
Los segundos mágicos en que aún me creo la alucinación
Mi inesperada bonificación gracias a una repetitiva e irreflexiva combinación
Mi suave rinconcito, mi dulce sueñecito sobre esa piel de tisú
El postre tentador, el pecaminoso tiramisú
Mi quitamiedos, mi gusiluz
Ese que parecía haberse fundido durante aquella noche tan larga y relampaguea hoy
Y todavía le tengo pavor a esta oscuridad, que infantil que soy
No debería estar ya acostumbrado ¿Por qué me redirijo hacia la chispa?
¿A caso ando mal de la vista? ¿O me abdujo un terrorista?
¿A dónde diablos voy?
Si no sé ni donde estoy
¿A dónde? A donde el mal karma, el mal yuyu, el mal rollo, el mal fario
A donde te caracterizan de presidiario
Hacia un acontecimiento francamente incendiario
Pero como desentenderse de la persuasión de tus pechos
De lo bien que se vive al otro lado de tu estrecho
De ese vientre tan sinuoso y terso
Cómo se consigue terciar de tema
Poner tu película favorita y no atender a ninguna escena
Romper con tu instinto y tambalear tus esquemas
Cómo espolear a lo pasajero para que se convierta en duradero
Cómo no ceder a tu encantamiento
Cómo no querer ser tu cerrajero
Aunque sea de tanto en tanto, de tiempo en tiempo
Mi Venus, mi misteriosa Artemisa
Mi admirada actriz de revista
Mi escapista inquieta y traviesa
Mi melancólica y denostable tristeza
Que me acoge cuando ya no estas, cuando desapareces y me dejas
Eres la preciosa flor que esporádicamente se abre
Cuando se cansa de subyacer y renace
En las inolvidables noches en que la redonda luna sale
Esas únicas que tú rebautizas en inigualables
Te atraparía por siempre pero, lo sé, es inviable
Permíteme que piense en ti sonriendo y pasándolas canutas
Que te sueñe a las duras y a las maduras
Y que te rapte de vez en cuando a tu voluntad y capricho
Porque no puedo abstenerme de tu abrigo
Porque me conformo aun al borde del colapso
Arriesgando otros 100 días más para recibir otro brutal trompazo
Porque me rindes, mi verduga, mi dulce ocaso

Es mío, sólo mío y me trae buenos recuerdos.
Adios, adeu. me encanta la cara del moro (Alicante) a ver si la terminan de restaurar y kitan los andamios del medio. me encanta mi nuevo piso(Argüelles-Madrid) aunque sea un quinto (es un apartamento-step). yo toi mu contento. un abrazo.